GIRE USTED POR LA ROTONDA, SEÑORITO. NO SE LO PIENSE DOS VECES

Yo hay días en que ya no sé ni qué pensar porque hay muchos días que pienso que los pensadores que piensan por nosotros a diario, no nos dejan pensar ni por nosotros mismos. Mientras nosotros mismos tengamos a buen recaudo el pienso con el que piensan que nos alimentan estos bien pensados, seguiremos teniendo la sensación de una flaca y falsa armonía. Aunque sean esos cuatrocientos eurejos que, piensan, darán para mantener la familia numerosa de un parado de larga duración que no se lo pensó antes. Y eso, nosotros mismos. Mismamente. Como un día pare otro...miel sobre hojuelas.
Si levantas la voz algo por encima del hombro ajeno puedes parecer patético por no saber expresarte como ellos, según los acotamientos y las correcciones que solo ellos se han marcado tiempo atrás mientras pensaban cómo joder la marrana, tirar la piedra y esconder el brazo o musitar aquello de: "Yo no he sido. Haberlo pensado antes".
Que no estás a su altura por más que pienses, dialogues o te esfuerces, porque para algo ellos son los entendidos, los expertos en cualquier materia, el "sum sum corda" y los omniscientes, Ha sido de siempre una ley muy estudiada y pensada como solo ellos saben hacerlo. Tu, yo, nosotros, vosotros y ellos les seguiremos pareciendo un títere, un peluche y en el mejor de los casos, un cero a la izquierda que es donde algunos también piensan. En la derecha suelen pensar con otra parte de la anatomía, generalmente por donde amargan los pepinos. De ahí las diarreas mentales y las hemorroides sufridas en silencio, (claro, si protestan son transfugas por usar su única neurona, si es que no se les ha muerto de asco).
Incluso si levantas la voz con voz bajita en tus propios círculos, puede que parezca una partida de ajedrez y te condenen al ostracismo, al desánimo y al desencantamiento. Alguien de los tuyos se comerá tu reina sutilmente sin ponerte los cuernos y más de uno seguirá pensando que eres un perdedor y que la partida no puede acabar en tablas. Eso te pasa por bocazas y por tener pensamientos impuros
Y si te callas, aunque sea por no liarla, que dos no discuten si uno no quiere, y a regaña dientes, serás señalado con el dedo, marcado a fuego con una tecla de ordenador y visitante ilustre de cualquier tablón de anuncios (de interés público y general) y quedarás marcado como un cobarde, un oportunista de pensamiento equivocado, hazmerreir de la chusma bien pensante y sin derecho a una opinión ajena que te libere consecuentemente.
Te estará vetado el poder pensar en libertad porque alguno te marcará a fuego para saber a qué bando perteneces con la frase de marras de Machado, el cual debía estar hasta el gorro de las dos Españas, de la piel de toro con Lusitania anexionada, de los santos aceites y de patearse los caminos sin mirar a ver si se había dejado algo atrás.
Ya no nos preguntan nada ¿para qué?. Siguen imponiéndonos su santa voluntad que para eso han estudiado. Detrás de su café humeante en cualquier bar a la hora que tendrían que estar trabajando en sus despachos oficiales, siguen pensando cómo hacernos la vida mejor o hacernos mejor la puñeta. Construyen rotondas que nadie pidió, retiran monumentos o colocan otros en su lugar de estética modernista con nocturnidad y alevosía. Elevan a los fumadores a la categoría de apestados y a los no fumadores a los altares de su hipocresía. Ayudan a las cajas y bancos que más tienen mientras éstas piensan cómo denegarnos un crédito o una hipoteca porque no tenemos pensado qué vamos a pagar con ellos. Imponen cánones en cualquier artículo para que la SGAE campe a sus anchas mientras la Sinde nos saluda con las bragas en la mano a los internautas apaleados con el beneplácito de Mamoncín, Alejandro Sanz y otros rentistas que componen canciones para que no pensemos lo mal que nos va el asunto, etc.
Mi amigo Sócrates en la lejanía de los siglos y antes de que le diera por dejar de pensar, falsamente acusado en su querida ágora por aquellos seres sabios que pensaban por él, y meterse un buchito de cicuta entre pecho y espalda, acompañado de Critón y alguno más, les dió con un canto en los dientes a sus respectivos legisladores, jueces, abogados o fiscales del momento y les, juraría, escupió a la cara, como para darles la razón: "Solo sé que no sé nada, (Εν οιδα οτι ουδεν οιδα [en oida oti ouden oida])"
Si se piensan que vamos a cercenar, limitar, soslayar o callar nuestros pensamientos, que sean ellos los que giren por la rotonda de los problemas, algo que no les costará mucho porque están acostumbrados de siempre, y nos dejen que el pensamiento fluya libre. Y, ante la duda, nuestro refranero, castizo y amarillento, pero vigente:"Si piensas, piensa mal y acertaras"